Si lo deseas, puedes adquirir este libro, «La Piel en la pintura», en Amazon.
¡Espero que lo disfrutes!
Eduardo Fonseca Capdevila.
Jefe de Servicio de Dermatología Hospital Universitario Juan Canalejo
Extracto del Prólogo del libro:
Los dermatólogos siempre fueron coleccionistas de imágenes. Al fin y al cabo, el ejercicio de esta especialidad sólo es posible gracias a una mayor o menor colección de imágenes de lesiones cutáneas almacenadas, con más o menos fortuna, en el intelecto.
Desde los inicios de la Dermatología, algunos de sus más destacados ejercientes quisieron exteriorizar esta colección de imágenes mentales, con el fin de hacerlas perdurar, ejercer la docencia o ampliar el conocimiento. A lo largo del último siglo y medio en que la Dermatología se ha desarrollado como especialidad médica, las lesiones cutáneas se han reproducido en dibujos, pinturas, esculturas de cera, litografías, fotografías en diversos soportes físicos, diapositivas y ahora, como casi todo, está dominado por las aplicaciones informáticas.(…)
El que un dermatólogo rizara el rizo y se preocupara de la expresión de las lesiones cutáneas en las obras maestras de la pintura es un paso más allá en una secuencia lógica, pero que se ha dado pocas veces y menos de una forma sistemática.
Para mí es una gran satisfacción prologar este libro de la Dra. Marqués y el haber compartido algunos pasos de su elaboración.
Pasar del diagnóstico por teledermatología que hoy practicamos con regularidad a diagnosticar lo que pintaron Goya, Velázquez y tantos otros es un auténtico lujo y de mucha menos responsabilidad.
Estoy seguro de que el médico-lector ha de disfrutar del acertado trabajo de selección de cuadros entre miles y miles de las más diversas pinacotecas y del análisis de las obras y los diagnósticos.
Respecto a estos últimos, constituyen en cualquier caso una sesión clínica abierta en la que todos pueden participar.
Mi más cordial enhorabuena a la Dra. Marqués y mis ánimos para que reparta algo más de su mucha energía con obras tan interesantes y amenas como ésta (…).
«El diagnóstico de algunas lesiones dermatológicas que aparecen en las pinturas de este libro es subjetivo y en otros casos muy imaginativo. Sólo así debe interpretarse incluir La primavera de Guissepe Arcimboldo y La belle Angèle de Gauguin como una rosácea.
En otros cuadros, se puede realizar un diagnóstico diferencial con otras afecciones dermatológicas. ¿Acaso las placas de alopecia areata que tienen los niños de los cartones de Goya no podrían ser tiñas del cuero cabelludo? ¿Es un xantelasma o un pequeño quiste epidérmico lo que presenta la Gioconda?
Por último, también hay que tener en cuenta que algunas patologías, que se valoran claramente en las pinturas originales, pierden definición al examinarlas en reproducciones. Por todo esto, me produciría una gran satisfacción despertar en el lector la curiosidad e inquietud de contemplar estas obras en su formato original y poder opinar sobre ellas«.
Madrid, octubre 2009
Olga Marqués Serrano
Especialista en Dermatología
Otros libros publicados:
Fantástico libro que lleva a descubrir una nueva y original forma de acercarse a grandes obras del arte, el estudio de la piel de sus personajes. La Dra. Marqués hace un recorrido por las patologías de la piel explicada de una manera muy didáctica y perfectamente representadas en las pinturas seleccionadas(la sífilis congénita en el Esopo de José de Ribera, el posible xantelasma de la Gioconda, la posible rosácea de La Primavera de Archimboldo, entre muchas otras). Debería ser un libro indispensable en las bibliotecas públicas y en la de la gente a la que le guste el arte y la dermatología.